Día de Africa – Firma para modificar Ley sobre derechos de extranjeros

DÍA DE ÁFRICA
– Firma para modificar Ley sobre derechos de extranjeros –

Esperábamos trabajadores, vinieron personas y queremos vecinos”.
(Cáritas)

Día de África 2021. Firma cambio Ley extranjeríaLa Coordinadora del Día de África (25 de mayo) -de la que forma parte la Delegación de Pastoral de la Movilidad Humana de nuestra Iglesia en Madrid- lanza un manifiesto con una propuesta de modificación de la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social. A él se adhiere, entre otras entidades diocesanas, esta Mesa por la Hospitalidad.

Es necesario difundir esta propuesta. Y también apoyarla con tu firma, para conseguir llevar la propuesta al Congreso de los Diputados y dar voz a esta causa:

  • El manifiesto completo puede verse en este PDF.
  • Y un amplio resumen está en la página donde puedes firmar individualmente: https://www.osoigo.com/es/t/q/62159
  • Si deseáis adheriros como entidad, enviad un correo a coordinadoradiadeafrica@gmail.com Enviad el logo de vuestra entidad para que, como se puede ver en el enlace de arriba, las entidades vayan apareciendo en el banner.

Síntesis del Manifiesto y la petición (el manifiesto completo está aquí)

DIGNIDAD PARA LAS PERSONAS MIGRANTES
Para que los derechos fundamentales no dependan de la situación laboral

Apostamos por dar visibilidad a las campañas de denuncia de la vulneración de los derechos humanos que sufren las personas en movilidad y lo hacemos amparados en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea y en la Constitución Española. Dichos textos normativos recogen en distintos artículos el derecho a la vida, a la dignidad, a la integridad física, a la igualdad y no discriminación, a la salud, a la asistencia social, a la vivienda, a la movilidad, al trabajo y a la justicia gratuita y universal de todas las personas.

La llegada de nuestras vecinas y vecinos africanos se debe en gran medida a la dificultad que encuentran para desarrollar una vida laboral digna y a la fragilidad de los servicios básicos y del propio sistema político de sus lugares de origen. Esto es causa, entre otras, de que para Europa el continente africano continúa siendo solo una fuente inagotable de recursos naturales, que nuestras empresas explotan en muchas ocasiones sin cumplir unos mínimos requisitos que garanticen los Derechos Humanos y el respeto y cuidado del medioambiente, debido a una falta flagrante de regulación en este ámbito.

La migración africana que recibe el continente europeo no es más que una gota en el gran flujo de migrantes internos en África.

Debido al contexto de pandemia y de crisis económica en el que nos encontramos, queremos denunciar en especial el fenómeno de la irregularidad sobrevenida y manifestarnos contra el marco jurídico que lo ampara. La irregularidad sobrevenida supone una vulneración grave de los derechos humanos y sitúa a las personas migrantes en niveles aún más extremos de precariedad que atentan directamente contra su salud, su integridad y su vida.

Consideramos esencial que la puerta de entrada a los derechos fundamentales no siga siendo el mercado laboral. La situación administrativa regular de una persona migrante no puede depender de una Ley de Extranjería que está orientada a ordenar el flujo de mano de obra extranjera. Proponemos que la situación administrativa regular se obtenga a partir del empadronamiento, a través de informes de esfuerzo de integración o de un seguimiento por parte de los servicios sociales donde se determine la situación concreta de cada persona.

Véanse en el manifiesto completo los cambios que se proponen a la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social:

  • Apartado primero del artículo 31, sobre la situación de residencia temporal.
  • Apartado segundo del artículo 31, centrado en la autorización de residencia no lucrativa.
  • Apartado tercero del artículo 36, sobre la autorización de residencia y trabajo.
  • Apartado cuarto del artículo 36, sobre la contratación de extranjeros.

Carta de nuestro arzobispo: Salvar vidas y construir futuro

Carta de nuestro arzobispo
SALVAR VIDAS Y CONSTRUIR FUTURO
– 21 de abril de 2021 –

MIG Niño abrazadoHace unos domingos estuve celebrando la Eucaristía en una parroquia en un barrio con una gran presencia de migrantes, fundamentalmente de Iberoamérica y algunos de África. Prácticamente la totalidad del templo estaba lleno de cristianos de esos lugares. Al finalizar la Misa, me fijé en una cruz de madera sencilla y, en un acto intenso y repleto de emoción, recordé aquella famosa Cruz de Lampedusa, construida con los maderos de una patera naufragada en el mar Mediterráneo. Pensé que esas buenas personas llegaron buscando un futuro mejor para ellas y sus familias. Vi a padres, hijos y abuelos, con todos los riesgos que corrieron hasta llegar aquí y con tantas personas y recuerdos que dejaron en sus países de origen. Y me vino a la mente aquella imagen del Papa Francisco cuando bendijo la Cruz de Lampedusa y nos pidió que la hiciésemos circular por todo el mundo para recordar a los que han perdido la vida en la aventura migratoria y, sobre todo, como llamamiento urgente para evitar la repetición de estas tragedias inasumibles. Al salir saludé a una familia; estaban los padres y cuatro niños, y les dije: «Haced circular vuestra fe en este nuevo ambiente en el que vivís. Mostrad que estáis entre nosotros para buscar un futuro mejor para toda la familia, pero que lo hacéis integrándoos en la comunidad cristiana y que contáis con la vida que os ha regalado Jesucristo».

Al hilo de este encuentro, quiero proponeros que nos hagamos las mismas preguntas que el Papa Francisco pronunció cuando se dirigía a toda Europa para hablar de los migrantes. Nos interpelaba con estas palabras de la Sagrada Escritura: «“¿Dónde está tu hermano?”, la voz de su sangre grita hasta mí, dice Dios. Esta no es una pregunta dirigida a otros, es una pregunta dirigida a mí, a ti, a cada uno de nosotros. Esos hermanos y hermanas nuestras intentaban salir de situaciones difíciles para encontrar un poco de serenidad y de paz; buscaban un puesto mejor para ellos y para sus familias, pero han encontrado la muerte. […] En este mundo de la globalización hemos caído en la globalización de la indiferencia. ¡Nos hemos acostumbrado al sufrimiento del otro, no tiene que ver con nosotros, no nos importa, no nos concierne!».

De acuerdo con Naciones Unidas, en 2020 había 280,6 millones de migrantes internacionales. Estos flujos pueden ser una gran oportunidad y riqueza para nuestra sociedad, pero también plantean interrogantes en las relaciones internacionales, en la gestión de la diversidad dentro de nuestras sociedades y en la manera que tenemos de dar una respuesta clara a las situaciones dramáticas de muchas familias que llaman a nuestras puertas. Las migraciones se han convertido en el rostro humano de la globalización, ¿cómo ha de vivir la Iglesia católica esta realidad?

En la Biblia hay experiencias migratorias, de exilio, de acogida y de hospitalidad. Los textos bíblicos nos presentan al Pueblo de Dios como un pueblo en continuo peregrinaje y a Abrahán, padre de grandes religiones, como un «arameo errante». Desde el comienzo de su pontificado, con palabras y hechos persuasivos, el Papa Francisco ha animado a la Iglesia a acompañar a todas las personas que se ven obligadas a huir de su hogar: estableció la Sección de Migrantes y Refugiados dentro del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, profundamente conmovido por el sufrimiento que la movilidad humana causa, y decidió guiar personalmente esta sección. En España, la Subcomisión Episcopal para las Migraciones y Movilidad Humana no cesa de sensibilizarnos, y está la Red Migrantes con Derechos, una respuesta global y coordinada de Iglesia a la realidad de las migraciones y el refugio en nuestro país. En Madrid instauré la Mesa por la Hospitalidad como órgano de coordinación y de concienciación eclesial y social.

En este sentido, es bueno recordar que el Papa Francisco nos pide a toda la Iglesia conjugar cuatro verbos, de los que en otras ocasiones os he hablado: acoger, proteger, promover e integrar a los migrantes y refugiados.

1. Acoger: abramos nuevos canales humanitarios seguros y legales para los migrantes y los refugiados. Cada uno de nosotros podríamos ser un emigrante. La decisión de migrar debería ser voluntaria. La migración misma debería ser segura, legal y ordenada. En ese sentido, los estados deberían prohibir cualquier forma de expulsión arbitraria y colectiva. Es necesario respetar el principio de no devolución. La Iglesia anima a los estados a adoptar una perspectiva de seguridad nacional que otorgue prioridad a la seguridad de las personas y a los derechos de todas las personas desplazadas que entran en su territorio, asegurándoles el acceso a los servicios básicos, facilitando procesos ágiles de identificación y de admisión a los solicitantes de asilo, y favoreciendo alternativas al internamiento de los extranjeros que intentan entrar en el territorio.

2. Proteger: garanticemos los derechos y la dignidad de los migrantes y de los refugiados. La Iglesia insiste en la necesidad de adoptar un enfoque integral e integrado, que sitúe a la persona humana en el centro, en todas sus dimensiones, con pleno respeto de su dignidad y sus derechos. El enfoque integral sigue siendo, sin lugar a dudas, la mejor manera de identificar y de superar los estereotipos peligrosos, evitando así estigmatizar a un individuo sobre la base de algunos elementos específicos y, en su lugar, tener en cuenta todos los aspectos y las dimensiones fundamentales de la persona entendida en su conjunto. Los migrantes, los solicitantes de asilo y los refugiados deben ser acogidos como seres humanos, respetando plenamente su dignidad y sus derechos, independientemente de su condición migratoria.

3. Promover: favorezcamos el desarrollo humano integral de los migrantes y de los refugiados. La Iglesia desea que los estados promuevan y preserven la integridad y el bienestar de la familia, así como de las personas con necesidades especiales, discapacidad o vulnerabilidad, independientemente de su condición migratoria; al tiempo que se adoptan leyes que faciliten la reunificación familiar, el acceso a la educación especial y a programas específicos para colectivos vulnerables. Animamos a adoptar políticas y prácticas que garanticen la libertad religiosa, en términos de profesión y de práctica, a todos los migrantes y refugiados.

4. Integrar: enriquezcamos a las comunidades mediante una mayor participación de los migrantes y los refugiados. La presencia de migrantes y de refugiados es una oportunidad para ampliar el horizonte humano en clave de integración e interculturalidad. Esto se aplica tanto a quienes son aceptados, que tienen la responsabilidad de respetar los valores, las tradiciones y las leyes de la comunidad que los acoge, como a la población autóctona, que está llamada a reconocer la contribución positiva que cada migrante puede hacer a toda la comunidad. Ambas partes se enriquecen mutuamente gracias a un proceso continuo de interacción y permeabilidad. Se pretende alcanzar la igualdad fundamental desde el respeto a la diferencia. Los desafíos que nos plantea nuestro mundo complejo e interconectado necesitan, hoy más que nunca, respuestas creativas, sostenibles y transformadoras. Desde esta pasión por el ser humano, fecundada por la Pasión del Señor Jesús, visibilizada en la cruz, con el Papa Francisco os digo que no nos dejemos llevar por «la civilización de la indiferencia». No perdamos «la gracia de llorar por la crueldad que hay en el mundo»; salvemos el valor supremo de la hospitalidad, que es fraternidad y que es decir con el Papa Francisco «todos hermanos».

Con gran afecto, os bendice,

+Carlos, Cardenal Osoro Sierra
Arzobispo de Madrid

Restaurante dando empleo a Menores Migrantes sin familia

Restaurante dando empleo a menores migrantes sin familia

MENAS. Taberna La Magdalena.Un laico de la Mesa por la Hospitalidad de nuestra Iglesia en Madrid, ha creado un restaurante en el que emplea a seis menores migrantes sin familia en España: Taberna La Magdalena. Algunos de ellos han estado acogidos en los pisos de Cáritas Madrid. Se puede comer, cenar, desayunar, tomar tapas… Toda la información en la web de la Magdalena.

El proyecto de La Magdalena surge, no solo para acercar la fantástica gastronomía cántabra a Madrid, sino también con un fin social.

La pandemia de la Covid-19 nos ha afectado a todos, pero ha tenido un grandísimo impacto en aquellos que ya se encontraban en una situación de vulnerabilidad. Es el caso de los menores desplazados forzosamente, que cuando cumplen los 18 años deben abandonar los centros de protección de menores. Chicos y chicas que, a pesar de adquirir la mayoría de edad legal, necesitan aún apoyo y acompañamiento hasta completar su formación y tener la posibilidad de comenzar una vida autónoma.

Estos jóvenes abandonan el Sistema de protección con una formación nula o escasa por varias razones: problemas con el idioma, falta de herramientas educativas específicas para paliar las desigualdades, nivel de estudios, etc. Esto, unido a las dificultades que encuentran para acceder a una vivienda digna, hace que la mayoría de los jóvenes abandonan el Sistema de Protección sin expectativas de conseguir un empleo, debido también a su situación administrativa.

En este contexto nace el proyecto de La Magdalena, con la intención de impulsar la integración sociolaboral de estos jóvenes. Así, en La Magdalena les brindamos la oportunidad de mejorar su currículo mediante una formación de calidad en cocina y restauración que les sirva como referencia de formación y experiencia para futuras oportunidades laborales.

Comenzamos esta aventura gracias al esfuerzo de un gran grupo humano que permitirá la contratación de seis de estos jóvenes. Seis jóvenes que, a día de hoy, ya disfrutan del primer “piso de autonomía”, y que tienen como objetivo aprovechar y fortalecer este proyecto, y emanciparse en un plazo no muy lejano con el fin de poder ofrecer esta misma oportunidad a otros jóvenes en su misma situación.

Como decíamos al principio, además del fin social, queremos ofrecer un lugar donde podrás conocer en primera persona la gastronomía cántabra. Todo el producto con el que elaboramos nuestra oferta llega desde Cantabria y hemos creado una carta que te permitirá descubrir lo mejor de la gastronomía de la zona con un producto de primera calidad, y con platos diseñados por un gran Chef, Carlos Núñez y su equipo , a quienes queremos agradecer desde aquí su implicación en el proyecto y el cariño con el que han elaborado nuestra oferta gastronómica.

La Mesa por la Hospitalidad ante las elecciones del 4M en Madrid

Logo de la Mesa por la Hospitalidad de Madrid

 

 

NOTA DE LA MESA POR LA HOSPITALIDAD (21.4.21)
ANTE LAS ELECCIONES DEL 4M EN MADRID

La Mesa por la Hospitalidad de la Archidiócesis de Madrid demanda a los partidos políticos que concurren a las elecciones en la Comunidad de Madrid que los debates y la publicidad de sus formaciones eviten cualquier forma de discurso de odio, de estigmatización a la población vulnerable y de falsa contraposición de derechos entre las personas. En razón de nuestra tarea, nos preocupa especialmente la situación de las personas migrantes y, en particular, de la infancia en situación de desventaja que, con independencia de su nacionalidad, goza en nuestro país de todos los derechos que su dignidad, no mensurable en términos económicos, reclama, como reconocen los convenios internacionales suscritos por España. El alarmismo, el miedo y la xenofobia no pueden ser fomentados y explotados con fines políticos (cf. Fratelli tutti 39 y 86).

La Mesa por la Hospitalidad de Madrid ante las elecciones del 4M— ADHESIONES (orden alfabético; haz un comentario o ecsribe a apoyo.innovacion@gmail.com) — — —

– Mesa por la Hospitalidad: Archidiócesis de Madrid – Delegación de Movilidad Humana / Cáritas Madrid / Comunidad de Sant’Egidio / CONFER / Justicia y Paz Madrid / Pueblos Unidos / SERCADE.

La Mesa por la Hospitalidad pide justicia para Helena Maleno

La Mesa por la Hospitalidad pide justicia para Helena Maleno

Justicia para Helena MalenoLa Mesa por la Hospitalidad de nuestra Iglesia en Madrid (integrada por la Comunidad de Sant’ EgidioJusticia y Paz CáritasConfer Migraciones Pueblos Unidos SercadeDelegación de Pastoral de la Movilidad Humana), se une a la Red eclesial Migrantes con Derechos para, atentos a las palabras del papa Francisco y a los últimos acontecimientos, sumarnos la petición que hacen diferentes entidades y organizaciones de la sociedad civil pidiendo #JusticiaParaHelenaMaleno, la defensora de derechos humanos que ha sido expulsada y deportada de Marruecos cuando volvía de un breve viaje de trabajo en España. Tras ser objeto de una violenta y repentina deportación, Helena se vio obligada a permanecer varias semanas separada de su hija menor de edad, temiendo por la seguridad de la misma mientras permanecía en el país que la había expulsado.

Recordemos que, hace pocos días, el papa Francisco insistía en su oración del mes de abril que todas las personas del mundo tienen el derecho a desarrollarse integralmente. Además, sostenía que «para defender los derechos humanos fundamentales hace falta coraje y determinación. Me refiero a oponerse activamente a la pobreza, la desigualdad, a la falta de trabajo, de tierra, de vivienda, de derechos sociales y laborales. Piensen que muchas veces los derechos humanos fundamentales no son iguales para todos. Hay gente de primera, de segunda, de tercera y de descarte. No, tienen que ser iguales para todos. Y en algunos lugares defender la dignidad de las personas puede significar la calumnia».

MANIFIESTO COMPLETO Y FIRMA (personal o de entidades) en la web de Caminando FRronteras -> Pulsa aquí.